Mis curvas confiesan: Arrasé con la Sex Shop
Mi primer juguetito
Un día que estaba tan entretenida viendo los modelos de lencería y repitiendo en mi cabeza miles de veces “¿qué hacía en una Sex Shop?” Me hizo brincar la pregunta del chico del mostrador -¿buscaba algo en especial?- Sin voltearlo a ver, le dije no, sólo comprobaba que en este tipo de tiendas jamás ayudarían a sentir sensual a las chicas con curvas. El se rió, me tomo de la mano, así que me obligó a verlo a los ojos, era muy guapo.
Cuando estábamos frente a frente, me dijo: claro que amamos a las chicas con curvas y más aún tan guapas como tú. ¿Qué necesitas? Un poco de diversión, le dije.
Me pidió que lo esperara un minuto, me soltó la mano, lo vi que se acercaba a un mueble con vibradores, tomó una caja chiquita y se volvió a colocar frente de mi.
Me invitó a pasar a un cuarto tan chiquito, no sabía qué estaba haciendo con un desconocido pero quería distraerme. Se agachó a besarme, perdí noción de todo lo que pasó cuando sentí sus manos en mis bubis.
¡Fue maravilloso! Tan placentero, el vibrador en mi vagina fue una sensación inexplicable, pero se acabó cuando mi celular sonó e interrumpió esa maravillosa escena.
Salimos al instante de ese pequeño cuarto y había una pareja en la tienda viendo los productos, yo me fui corriendo a contestar mi celular… Él se colocó dentro del mostrador, atendí la llamada mientras pensaba en comprar ese vibrador tan maravilloso…
Regresé a mi bolso y encontré dentro ese sexy juguete de amor con una nota que decía. Nos vemos el próximo viernes.