Los antojos de comer algo dulce, salado o picante son muy normales durante el proceso de formación de tu bebé, pues son el resultado de que algo está cambiando en tu metabolismo.
Otro punto muy importante es que son indicadores de que está faltando una vitamina en tu cuerpo, por ejemplo si se te antoja algo dulce quiere decir que necesitas calorías, o si quieres una naranja puede ser que te falte vitamina C, así que no te sientas mal por comer, estás en todo tu derecho pues es algo que tu organismo está pidiendo.
Disfruta la espera de ser madre ¡sin ningún remordimiento!
- Chocolates. No te prives de este delicioso placer; define una cantidad diaria que no te parezca muy excesiva, por ejemplo, si decides que el día de hoy tu máximo serán 5 chocolates puedes colocarlos en distintos lugares de tu casa para que cuando sientas el antojo hagas un poco de ejercicio y al final obtengas tu recompensa.
- Quesos. ¡Son súper válidos! Pues contienen el calcio necesario para fortificar tus huesos y ayudar al desarrollo de tu bebé.
- Frituras. Estas son comunes pero no muy saludables, así que trata de resistir lo más que puedas el antojo y si ya no puedes más con la tentación, come las que estén menos condimentadas para evitar dolor de estómago.
- Helados. Habiendo tantos sabores hoy en día es imposible que no se te antoje alguno. Tienes permiso de consentirte ¡te lo mereces!
- Mariscos y pescados. Esa sensación del mar en tu boca es deliciosa, y lo mejor de todo es que estos alimentos te ayudan con las proteínas necesarias para tener un embarazo relajado y que tu bebé se desarrolle sanamente.
¡Se vale comer de todo! ¿Cuáles son tus antojos más comunes?
AVN