No dejes que nadie te engañe y desmiente estos pensamientos.
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“A otra con ese cuento”, dirás de ahora en adelante cuando una conocida te quiera chorear sobre esas experiencias incómodas que dice tener durante el sexo y que la mayoría de las veces no es cierta. Lee y conoce.
¡Desmiéntelos y disfruta tu sexualidad!
Ruidos extraños salen de tu vagina
Cabe la posibilidad de que esos ruidos provengan de tu intestino, pero la mayoría de las veces viene de la vagina debido a que con las penetraciones, el miembro de tu galán empuja aire al interior del útero que sale una vez que paran las embestidas o cambian de posición, puede ser desde sutil a muy ruidoso… pero son gajes del oficio, ni te fijes.
Las mujeres somos más “frías” que los hombres
En realidad tener más o menos sexo tiene que ver con nuestra educación, nuestras creencias, miedos, permisos, etc., que con nuestra naturaleza. A ellos se les dice que está bien tener relaciones, a nosotras no, pero va siendo hora de echar a bajo esta leyenda caduca.
Si mi novio se viene durante el sexo oral, al penetrarme ya no expulsara semen, y no me embarazaré
¡Uy! Si te dejas llevar por esta creencia no te sorprendas si quedas embarazada. El que tu pareja expulse semen en una primera eyaculación no garantiza que expulse todo el que contienen sus testículos.
El mejor es el orgasmo simultáneo
No necesariamente. Pueden tener orgasmos deliciosos e intensos por separado, no se empeñen en tener siempre un orgasmo juntos, recuerda que los tiempos de hombres y mujeres para llegar al clímax son diferentes. Y encuestando a varias chicas descubrimos que muchas alcanzaban el orgasmo justo cuando él estaba terminando pues al irse retrayendo el pene había mayor estimulación del clítoris o punto G. Ahora que si se empeñan en llegar juntos como tip te decimos que comiencen con unos preliminares muy candentes para que tú llegues en menos tiempo.
El alcohol aumenta el deseo sexual
Esta no falla como la excusa principal para tener sexo después de una noche de copas, pero no es verdad. Lo que sucede es que tras unos drinks te desinhibes, te sientes más sexy y eres capaz de aventarte a hacer cosas que sobria te daría pánico escénico hacer o decir. Pero sabes qué, está más rico hacer travesuras en completo juicio… a ver hasta dónde te atreves a llegar.
