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Aunque el Día de Muertos se celebra en cada rincón de México, hay algunos lugares en los que sus habitantes se lucen en estas fechas y preparan las mejores ofrendas para honrar a sus muertos. 

 

 

 

Cada 2 de noviembre estos lugares se llenan de flores de cempasúchil, velas, pan de muerto y papel picado. Si no te quieres perder esta atmósfera que nos conecta con nuestras raíces, estás a tiempo de ir. 

 

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En la Ciudad de México hay muchos rincones en donde se respira la tradición: 

 

- El Barrio Mágico de Mixquic, situado en el extremo sureste de la capital mexicana. El panteón de San Andrés es el escenario principal, las tumbas se visten con flores, calaveras de azúcar y platillos en honor a los fieles difuntos. Hay música, concursos de calaveras y un cortejo fúnebre escenificado, el cual hace gala del humor mexicano.

 

 

- En el Zócalo de la ciudad se monta una espectacular y colorida megaofrenda, y el 2 de noviembre se ofrece pan de muerto y chocolate a los visitantes. 

 

 

- La megaofrenda de la UNAM, que cada año se dedica a un tema distinto. Originalmente se montaba en la zona conocida como “las islas” y desde hace unos años se coloca en otros puntos. Se puede visitar desde varios días antes del Día de Muertos y es uno de los eventos más esperados del año por la comunidad universitaria.

 

 

 

- Xochimilco, en donde se realizan representaciones de la leyenda de La Llorona y otras actividades. Además, ¿a quién no se le antoja visitar la Isla de las Muñecas en estos días?

 

 

- El Museo Dolores Olmedo, que desde hace 20 años exhibe magníficos altares que brindan un homenaje al trabajo artesanal de México. 

 

 

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Pero si tienes la oportunidad de tomar tus maletas y aventarte un mochilazo, puedes ir a… 

 

1. Pátzcuaro, Michoacán. 

Michoacán es el Estado que tiene más arraigada la tradición de Día de Muertos, aquí los pueblos purépechas que rodean el lago de Pátzcuaro y la isla de Janitzio realizan el ritual de velación. 

 

 

En este pueblo mágico la festividad se siente en todos los rincones. El panteón está cubierto de ofrendas, en la Basílica de Pátzcuaro se presentan piezas alusivas a la muerte y de los embarcaderos parten numerosas lanchas a la isla de Janitzio, mientras los pescadores realizan sus rituales. En Tzintzuntzan, la noche del 1 de noviembre hay obras de teatro al aire libre, instalación de ofrendas y una presentación de juegos prehispánicos de pelota encendida.

 

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2. Huaquechula, Puebla

Esta localidad ubicada a 45 kilómetros de la ciudad de Puebla es reconocida por los hermosos altares que se instalan el 1 y 2 de noviembre. Los altares fusionan el estilo de la tradición prehispánica con el Jueves Santo, dándole un colorido predominantemente blanco. Los más destacables son los de “cabo de año”, dedicados a aquellos que murieron los meses previos al Día de Muertos. 

 

 

A las 2 de la tarde del 1 de noviembre suenan las campanas del templo, anunciando la llegada de los muertos, que son guiados por caminitos de flor de cempasúchil. Las ofrendas se sahúman con copal e incienso y se abren las puertas de las casas. Por la tarde continúa la procesión callejera de visitantes, pero en la noche el pueblo se ilumina y los deudos-anfitriones, entre el dolor de la pérdida y el orgullo de presentar el magnífico altar, ofrecen chocolate con pan hasta bien entrada la noche.

 

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3. Huasteca Potosina

En la parte oriental de San Luis Potosí, la fiesta de los muertos se llama Xantolo y es la festividad más importante de la zona, pues representa la sagrada reunión de los vivos con sus antepasados, así como el verdadero sentido de la existencia. Se cree que las ánimas de los difuntos permanecen todo el mes, por ello el último día de noviembre se renueva la ofrenda y se adorna el altar con frutas y flores para despedir a los difuntos.

 

 

 

En la Ruta Xantolo están los municipios de Aquismón, Axtla de Terrazas, Ciudad Valles, Huehuetlán, San Martín Chalchicuautla, San Vicente Tancuayalab, Tancanhuitz, Tanlajás, Tanquián, Tamazunchale, Tampacán, Tampamolón, Tamuín, y Xilitla. En cada uno de ellos se realizan exposiciones, ofrendas y muestras gastronómicas.

 

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Y tú, ¿a dónde vas a ir este Día de Muertos?