El club de los labios rojos: Lo que hacemos por desamor
Un corazón roto puede hacer cualquier cosa
Es cierto que cuando estamos enamoradas, nuestro mundo cambia; vemos todo mucho más bonito y lo sentimos mucho más confortable, toleramos todos aquellos aspectos que nos desagradan y llegamos a hacer cualquier cantidad de cosas cursis por demostrar nuestro sentir, pero ¿qué pasa cuando nos topamos con el desamor?
Por Judith Lucio / @Judith_Lucio
Una chica dolida y despechada es capaz de hacer cosas horrendas con tal de quitarse ese dolor, lo feo del desamor comienza cuando se sobrepasan los límites de la coherencia y la cordura, ahí suceden situaciones muy intensas que a veces rayan en lo peligroso y hasta en lo ridículo.
He escuchado de chicas que en su intento por 'vengarse' y sacar su dolor han hecho de todo:
La venganza…
Revelan los más oscuros secretos de sus exparejas con la única intensión de que los amigos y familiares se enteren de la clase de personas que son.
Ocultan embarazos y viven con siendo madres solteras sólo por no darles a sus exnovios el gusto de ser padres.
Desean la muerte, el desamor es un sentimiento tan doloroso e insoportable que sólo acabaría con la muerte de quién lo provocó.
Se hacen daño físico con la creencia que de ese modo lastimarán al hombre que les hizo daño.
Amenazan y acosan al chico en cuestión.
Comienzan nuevas relaciones para darle celos al anterior.
Tienen aventuras con diferentes chicos con la intensión de sacar de su cabeza y corazón al chico que aman.
Y así podría decir infinidad de cosas que una chica en pleno desamor puede llegar a hacer no es que yo haya hecho alguna, o tal vez sí, el punto es que algunas "venganzas” pueden parecer hasta bizarras ya que cuando estás enamorada y te rompen el corazón, la conciencia y la elocuencia no tienen cabida; tanto que a veces el dolor es tan grande que sólo se encuentra consuelo en la depresión o en el libertinaje.
Está bien llorar por algo que realmente dolió, está bien sacar el dolor y está mucho mejor superar eso que hace daño, por eso no inventes mil formas de darle su merecido a ese chico que te jugo mal y te hizo sufrir. La mejor venganza es levantarse un día, limpiarse las lágrimas, cerrar ese capítulo y continuar tu vida con la frente en alto.
Recuerda que superar el pasado y ponerle bastante indiferencia es el peor castigo para aquél que te dejó en desamor.