Qué le dirías al yo de 5 años
Apenas me encontré con esta pregunta en Facebook y obvio no pude evitar responderla, por supuesto, quiero compartirlo con ustedes estas reflexiones y que ustedes lo hagan conmigo…
En 1991 tenía 5 años, recuerdo que escuchaba a Gloria Trevi, Alejandra Guzmán, Onda Vaselina, Michael Jackson y muchos otros… creo que hasta a Caló #OsoMil, pero bueno, era una niña muy normal -aunque a esa edad ya comenzaba a cursar la primaria-; sólo tenía una hermana en ese entonces, dos años después tuve una más y 10 años más tarde a los dos últimos. No sabía decir la R, aprendí a hacerlo hasta tercero de primaria, por supuesto que muchos se reían de mí, pero afortunadamente no era algo que me causara problemas, básicamente no me afectó.
Recuerdo que señalaba con el dedo medio, ya se imaginan cada que decía “¡Mira!” lo que pasaba. No me gustaba traer zapatos, ni peinarme, ni vestirme, siempre andaba en ropa interior y mugrosa. Jugaba mucho con mi única hermana y mis papás, mi mamá cuenta que le tirábamos sus cosméticos por la ventana, yo no me acuerdo, y ya saben: “si no me acuerdo, no pasó”.
Tengo que admitir que era muy latosa, mi mamá a veces lloraba por la desesperación #SorryMom, nunca se me va a olvidar que Giovanna -mi hermana mayor- y yo, intentamos depilarnos (sí, a esa edad que ni pelos tienes) ¡con resistol 5000! Por alguna estúpida razón se nos hizo que podría ser cera, GRAN ERROR, quitárnosla fue una pesadilla.
10 Ideas de decoración para tu depa de soltera
No es por presumir, pero fui una niña muy inteligente… igual que ahora, sólo que ahora son una adulta inteligente, jeje. Aprendí a caminar muy chiquita, a leer y a sumar. Siempre era la consentida de mis maestros, menos de la maestra Esperanza, que se atrevió a darme un manazo, por supuesto mi mamá la puso en su lugar. Desde ese día me odió y yo a ella, claro.
Me abrí la frente dos veces, seguro han visto mi cicatriz; una fue jugando con un colchón que iban a tirar, me subí como si fuera resbaladilla y me pegué en la pared, la segunda vez fue jugando burro 16, fui a dar al tambor de la cama. Eso sí, vanidosa desde siempre, pues lo único que me preocupaba fue que me tenían que cortar un poco el fleco y que todos en la escuela me verían.
Ah, no me pregunten cómo lo hice, pero de alguna forma aprendí a contestarle a quien fuera “¡Loco, neurasténico, amargado!” o “¡Loca, neurasténica, amargada!”, según fuera el caso.
En fin… ya que saben un poco más de mí, paso a escribirle a mi yo de 5 años lo que debe saber para cuando tenga 29:
Lo que nunca nadie te dirá de vivir en tu depa de soltera
