Veintitantos

 

Porque si tú también eres del club 'antes muerta que sencilla', sabrás que una verdadera mujer valiente y entregada a la causa debe aguantar los tacones desde que sale el sol hasta que cae la noche.

Sí, eso suena increíble, porque no tendrías que cargar tu par de flats diario de la oficina a tu casa, pero no está cool verte súper chic mientras en plena banqueta hacemos el cambio de estilo, por eso te compartimos algunos tips que te ayudarán a soportar el tacón de aguja del 20 - que en primer lugar, ¿por qué lo compraste? 

1. Nunca estrenes zapatos. No importa cuantas ganas tengas de presumir al mundo los increíbles zapatos nuevos que compraste ayer, lo único que verán son cómo sangran porque el zapato te lastima. Lo ideal es primero amoldarlos a tu pie, en la comodidad de tu hogar durante al menos 5 días, si no parecerás Bambi y es cero hot.

2. Elige bien tu estilo de zapato. Es mucho más sencillo durar más tiempo de pie y entera con un par de tacones con pulsera o tiras porque de esa forma tienes mayor soporte, tus pies se cansan menos y no vas a terminar mega adolorida por pasar toda la noche sosteniendo el zapatos con tus dedos.

 

3. Hidrata. ¡Ah! No cualquier hidratación, hablamos de una crema mágica, busca pomadas o cremas que contengan ibuprofeno, al ser antiinflamatorio y analgésico ayudarán a no sentir el dolor de pies durante el día.

4. Cinta adhesiva. ¡Si funciona! Uno de los problemas por los que terminamos cediendo antes de quitarnos los tacones es que a veces por alguna razón extraña se nos salen, como dicen las abuelas ¡vamos chancleando! Para esos casos cuando el zapato no se sujeta al tobillo aplica poner un poco de cinta doble cara en la planta del pie, en el talón o el borde del zapato y verás cómo ese problema se termina.

 

Cómo cuidar tus zapatos según su material 

 

5. Almohadillas. En cualquier zapatería o área de calzado de las tiendas departamentales encontrarás unas mini plantillas que tienen la forma de la punta del pie, son lo máximo para aliviar la presión del peso del cuerpo justo en nuestro frágiles dedos además de que si usas sandalias abiertas ayudarán a evitar que el pie se deslice, son súper prácticas y cómodas.

 

Ahora si no hay pretexto para perder la zapatilla a media noche, nada de hacernos la Cenicienta, ella perdió el zapato por una buena causa, nosotras hacerlo por dolor no cuenta.

 

 

 

KV