5 estrategias que evitarán que subas de peso

Que comas inteligentemente significa que lo hagas con todos tus sentidos, disfrutando de cada bocado que te lleves a la boca sin el menor remordimiento. Aquí te diremos 5 trucos que te harán disfrutar la comida sin engordar:

 

1. Siéntate cuando comas. A veces estamos tan ocupados haciendo otras cosas que ni tan siquiera ponemos atención a lo que comemos. Para evitar que no disfrutemos la comida, se hace necesario que cuando lo hagamos tomemos el tiempo suficiente para poder sentarnos, oler, ver y tratar de adivinar qué ingredientes contiene cada bocado que nos estamos llevando a la boca. Esto hará la diferencia entre comer poco y con conciencia o comer mucho y ni tan siquiera notarlo. 

 

2. No comas si estás hablando por tu celular, checando tus mails o viendo la televisión. El que estés sentado no implica que te concentres en tu comida. Un estudio encontró que las personas pueden comer hasta 40 por ciento más cuando están viendo la televisión, pues no se dan cuenta de lo que están ingiriendo. Así que no te distraigas con el celular o la tele a la hora de comer.

 

3. Ojo con lo que bebes. Es muy fácil creer que estamos comiendo sanamente porque le bajamos a las grasas de las comidas sólidas, pero a veces se nos olvidan los azúcares que contienen las bebidas. Así que ten especial cuidado con los refrescos, los jugos y los cafés están llenos de ellas. Así, a la hora de elegir escoge sabiamente qué líquido vas a tomar, obvio, lo mejor es el agua.

 

 

 

4. Elige la opción más sana. Si de plano este viernes no tienes más opción que comerte una hamburguesa –tus ocupaciones no te permiten otra cosa-, entonces opta por aquella que tenga más vegetales y menos grasa, y pide una ensalada como acompañamiento en vez de las clásicas papas. Recuerda que siempre puedes cambiar un platillo por una versión más sana.

 

5. Escribe lo que comes. Si crees que comes poco, pero no bajas de peso, puede ser que sin saberlo estés haciendo trampa. Un buen truco para darte cuenta es apuntar todo lo que comes por unos días, pues te permitirá estar más consciente de las calorías que ingieres. Escribe todo, desde esas dos galletas que te comiste junto con el café, hasta las papitas que agarraste a medio día. Esto te ayudará hará a notar qué debes dejar de hacer.