Veintitantos

 

Como tal no se trata de que tus boobs te hagan más o menos lista, o que tu cerebro tenga repercusiones por el tamaño.

Lo que sucede es que su tamaño, desde la adolescencia, nos hace crear una imagen mental de nosotras mismas; de acuerdo como vamos creciendo comenzamos a tener una imagen y percepción de nosotras que, sin querer, crea pensamientos de lo que somos, decimos y actuamos. 

Más allá que afecte tu cerebro, son esas imágenes mentales que nos creamos de lo que somos y de lo que la gente ve de nosotros; además la inseguridad y/o seguridad que vamos incrementadno según la sociedad y los esteriotipos que existen en ella. 

• Boobs grandes. Las mujeres que tienen senos grandes a temprana edad, como el caso de la gran mayoría de las curvys,  nos enfrentamos al acoso, al sentimientos de ser sexualizadas aunque, probablemente, aún no estamos listas para ello. 

Empodera tus curvas con actitud body positive

 

• Boobs pequeños. Las mujeres con pocos senos o que no se “desarrollan primero”, tienen la falsa percepción de que hay algo malo con su cuerpo. En parte porque reciben cierto grado de atención negativa por parte de los hombres. 

Y aunque estos problemas comienzan en la adolescencia, de grandes la situación no mejora, nunca estaremos conformes con el tamaño de nuestros senos. 

 

Carla Morrison responde con sorprendente actitud los comentarios negativos sobre su cuerpo

 

Aunque bien es cierto, cada una de nosotras debe estar conciente de lo que somos y lo que queremos transmitir a los demás.