No me cabe la menor duda que a la mayoría de las personas les encanta bailar, es una forma divertida  de compartir alegrías, pasión, elegancia, destrezas y habilidades; aunque, para muchas personas bailar puede convertirse en un dolor de cabeza: tienen miedo  que los  demás se burlen de sus  pasos  al bailar, pero para otros es algo fascinante y divertido, el miedo simplemente está en nuestra  mente.  

A mi entender uno de los bailes más hermosos es el  Belly Dance, una danza que combina las variadas culturas del norte africana y el medio oriente, es muy popular entre esos países y otros cercanos.

Este baile es  conocido y  caracterizado por los suaves  y rápidos movimientos de la cadera; su elegancia reside en la precisión de los movimientos.

Hay diversidad de Belly Dancers desde las más delgadas hasta la más curvilíneas. La clave es aprender a no tener vergüenza de nuestro físico, tener seguridad y disfrutar cada movimiento al danzar.

No dejes que la forma en que te perciben los demás te impida bailar la danza del vientre, es un baile muy gratificante que ofrece una gran cantidad de expresión y permite realmente llegar a conocer y estar cómodo con uno mismo sin importar la talla.