'Sexy por accidente' y los poderes mágicos de la autoestima
¿Cómo funciona eso de que la belleza viene de dentro?
Cortesía
01/06/2018 | Autor: @LucyEditora
La comedia de Amy Schumer me ha ido ganado poco a poco. Y como me sucede con la mayoría de los standuperos, a veces la siento demasiado gráfica y agresiva. En sus anteriores películas, no logré conectar con los momentos cómicos porque me parecían demasiado absurdos. Recuerdo que en una entrevista Jordan Peele (Get Out) me dijo: “Cuanto más realista sea la comedia y el terror, mejor funcionan”, y eso explica por qué quizá sus cintas previas no han sido tan populares.
En este escenario complicado, la rubia comediante estrenó su nueva película Sexy por accidente, cuyo título traducido del inglés sería "Me siento bonita" y describe a la perfección la trama de la cinta.
Este proyecto causó polémica desde que se estrenó el primer trailer porque se pensaba que perpetuaría este complejo de que solo cuando pesas 40 kilos y mides 1.70 tienes el derecho a sentirte bonita. Pero la historia va más allá de eso.
En Sexy por accidente, Amy Schumer interpreta a Renee, una chica en sus veintitantos (o quizá 30, no importa) con sobrepeso y una cabellera que no sería precisamente para un anuncio de shampoo, pero sobretodo con una tonelada de complejos y limitaciones ¡qué solo viven en su cabeza!
Así, acepta un trabajo que la mantiene encerrada en una bodega en uno de los barrios menos glamurosos de Nueva York, acepta que un barman no tenga por qué atender sus pedidos y se acostumbra a ser ignorada por hombres, colegas e incluso amigos. Hasta que un día, en una clase de spinning sufre una estrepitosa caída llevándose un tremendo un golpe en la cabeza. Cuando reacciona y se mira al espejo, por primera vez en su vida ve la belleza que le había pasado desapercibida. Y entonces experimenta este derecho a sentirse atractiva y a buscar las cosas que quiere en la vida porque puede.
En medio de situaciones cómicas, la película toca varios puntos en donde, me atrevo a pensar, que todas las mujeres de la sala han experimentado. Y es aquí donde radica la genialidad del guion escrito por Marc Silverstein y Abby Kohn (Cómo ser soltera) que no solamente abarca de manera superflua un problema de aceptación del cuerpo o belleza interna como ha pasado en otras comedias (Te estoy hablando a ti ‘Amor ciego’) sino que realmente proyecta las inseguridades que enfrentamos las mujeres todos los días sin importar si tenemos una belleza tipo Kardashian-Jenner o no.
En la cinta hay otros dos personajes femeninos que interpretan a mujeres convencionalmente hermosas, una rubia, esbelta y glamurosa (Michelle Williams), CEO de una marca de belleza que tiene un enorme complejo por su voz aguda y porque su abuela y su hermano se la pasan descalificando sus ideas y habilidades; y la otra es Emily Ratajkowski (no necesitamos decir más), quien sufre el rechazo del amor de su vida y el escrutinio constante de: “no tienes derecho a sentir inseguridades porque eres físicamente hermosa pero tampoco daremos crédito a tu inteligencia o habilidades porque eres bonita”. ¿Eh?
Entonces esto hace pensar que, si nunca le daremos gusto a nadie porque nunca cumpliremos las expectativas que se tienen de nosotros sin importar cómo nos vemos o lo que somos; por qué no salimos y somos y nos vemos como queremos y nos creemos ese derecho a merecer lo que queremos en la vida y luchamos por ello. ¿Qué más da?
Sexy por acciente se estrena este fin de semana en México.
