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Cuando hablamos del sexo, se dice que experimentar un orgasmo es la meta de todo encuentro íntimo, o por lo menos lo más agradable del mismo. Sin embargo, hay muchas mujeres que solo lo han sentido una que otra vez, y algunas no lo han vivido nunca. A esto se le conoce como anorgasmia y las causas pueden ser diversas. 

En un estudio realizado por el Instituto mexicano de Sexología (Imesex) en 2011, se encuestó a mil mujeres, y el 50% manifestó que nunca o rara vez alcanzan un orgasmo en una relación sexual, según informó Juan Luis Álvarez-Gayou, terapeuta fundador de dicha institución.

De acuerdo a los especialistas, hay diversas razones para que esto suceda. Puede tratarse de situaciones orgánicas como la menopausia, infecciones vaginales o el efecto de algún medicamento. También algunas cuestiones situacionales como los problemas de pareja, la depresión y el estrés, que pueden disminuir el deseo sexual y provocar insatisfacción. 

Para Yolanda Falcón, psicoterapeuta corporal, la anorgasmia también puede derivar de algún problema psicológico, “la persona tiene miedo de enfrentar la sexualidad por alguna experiencia anterior o por ideas equivocadas en torno al acto sexual, lo que ocasiona tensar involuntariamente los músculos de la vagina y que el coito sea doloroso. En ocasiones, ni siquiera se permite la penetración, mucho menos el orgasmo”.

Por otro lado, Noemí Ehrenfeld, investigadora del departamento de Biología de la Reproducción de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), afirma que también puede deberse a que el orgasmo no se experimenta siempre de la misma manera. 

La ausencia de orgasmos orilla a muchas mujeres a fingirlos, por lo general para no defraudar a su pareja, aunque sabemos que hay varias razones para fingir un orgasmo. 

 

Para Ehrenfeld, el orgasmo “no es obligatorio, no es una carrera”. Además, señala que muchas chicas depositan en el hombre la responsabilidad de proporcionarle el orgasmo, pero el afirmar que “no hay mujeres anorgásmicas, sino hombres incompetentes”, es una forma pobre de tratar el problema, ya que “los varones se hacen cargo de sus cuerpos y nosotras nos tenemos que hacer cargo de los nuestros”.

Los especialistas concuerdan en que los factores socioculturales son los que más afectan la capacidad de las mujeres para sentir un orgasmo. Pero también, los mismos terapeutas reconocen que la mejor arma contra la anorgasmia es la autoexploración. 

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Si por más que lo has intentado no consigues tener un orgasmo o solo lo has logrado unas pocas veces a lo largo de tu vida sexual, lo ideal es consultar a un especialista que sea capaz de determinar si el problema es físico o psicológico. Lo importante es atenderte y tratar el problema desde su origen para que puedas experimentar el máximo placer. 

 

Con información de La Jornada.

 

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