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La sexualidad femenina aún guarda muchos misterios, incluso para las propias mujeres. Muchos de ellos se centran en el orgasmo y, especialmente, en la eyaculación femenina. Por eso, aquí te presentamos algunos de los mitos que ya urge desmentir sobre el también llamado ‘squirt’.

¿Qué es la eyaculación femenina?

La sexóloga española  Mónica Quesada, en su artículo “La eyaculación femenina” publicada en la revista Pikara, comenta que las investigaciones sobre el tema son confusos y demuestran la despreocupación con respecto a la sexualidad y, en concreto, a la de la mujer. 

Según la especialista, la eyaculación femenina es la expulsión de fluido que experimentan algunas mujeres durante el orgasmo, a través de la uretra. Las responsables de la eyaculación femenina son las glándulas de Skene que se encuentran en la pared anterior de la vagina, alrededor del orificio de la uretra, cerca de donde se sitúa el punto G. Estas varían de tamaño dependiendo de la mujer.

Ahora, veamos los mitos sobre la eyaculación femenina que urge desmentir:  

1. Todas las mujeres pueden eyacular

En realidad, según las pocas investigaciones sobre el tema, el 80% de las mujeres posee glándulas de Skene. De acuerdo al Dr. David Barrios, médico, psicoterapeuta y sexólogo clínico, solo “el 15% de las mujeres experimentan algo que se puede llamar ‘eyaculación’ femenina”. Se cree que la razón por la que unas mujeres tienen las glándulas y otras no, es debido a que es una zona residual que se desarrolla o no durante el crecimiento del feto. 

2. Es orina

¡Claro que no! Las glándulas de Skene secretan líquido prostático mediante las contracciones del orgasmo. El líquido es de color blanco claro o transparente y es expulsado en gotas o chorros. Por esto, muchas mujeres piensan que se pueden orinar e inhiben este proceso natural del cuerpo.

3. Es obvio cuando hay eyaculación femenina

No siempre, ya que en ocasiones solo se expulsan unas gotas de líquido. Incluso puede que ya lo hayas experimentado, pero no te diste cuenta. Según el doctor Barrios, la cantidad de fluido puede variar “desde una cucharada, algo así como 5 centímetros cúbicos, o hasta un vaso de 150 ml. Hay mujeres que relatan que literalmente mojan la cama”.

 

4. La mujer puede controlar si eyacula o no

Sí, y no. Por una parte, como ya explicamos, no todas las mujeres tienen las glándulas necesarias para expulsar el líquido de la eyaculación, así que por más que estén excitadas y se esfuercen, lo más probable es que no lo logren. Por otro lado, las que sí tienen la capacidad de conseguirlo pueden bloquearlo, solo contrayendo los músculos del piso pélvico, como cuando te aguantas las ganas de orinar. 

5. La eyaculación femenina es un buen lubricante

La experta en sexo y sexualidad, Janella Jones, afirma que la textura del líquido eyaculado durante el sexo por la mujer es similar al agua. Por lo tanto es más resbaladizo y causa fricción, lo que en realidad hace más incómoda la penetración. 

6. La eyaculación femenina y el ‘squirt’ son lo mismo

En realidad, ni siquiera los especialistas en el tema se han puesto de acuerdo sobre este punto. Para muchos, los espectaculares ‘squirts’ que vemos en las películas porno son sinónimo de eyaculación femenina. Según otros, en realidad se trata de reacciones separadas que nos hacen secretar distintos tipos de líquido por orificios diferentes. Puedes checar todo el debate aquí.

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No cabe duda que aún nos falta mucho por aprender sobre nuestra sexualidad.

 

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