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La estimulación manual es un básico que las chicas debemos dominar. No siempre se trata de un simple juego previo, si lo haces bien, el handjob puede ser el plato principal y dejar a tu hombre totalmente satisfecho, así que toma nota de estas técnicas para darle placer con tus manos.

Si quieres darle un giro al estilo clásico, aquí te compartimos nuestras 5 técnicas favoritas de masturbación, para que lo sorprendas la próxima vez.

 

1. Gira y desliza

Esta es muy fácil de realizar y promete mucho placer. Mientras sostienes su miembro con una mano, con la otra acaricia su glande con un movimiento circular, y deja que esa mano se deslice hacia abajo por todo el largo de su pene hasta la base. En cuanto comiences a bajar la mano uno, sube la mano dos hacia la punta y repite el mismo movimiento de girar y deslizar. Continúa haciéndolo de forma lenta y fluida, ¡le encantará!

 

2. No te limites a las manos

Puedes integrar al juego otras partes de tu cuerpo como la boca o los senos. No se trata de cambiar el handjob por sexo oral o por una “rusa”, pero mientras trabajas con tus manos puedes jugar un poco con tus labios y lengua, o dejar que su miembro roce tus boobs para que explote de placer.

 

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3. El collar de perlas

A veces conviene incluir otros elementos para dar nuevas sensaciones. Uno de los más efectivos son los collares de cuentas redondas, como perlas. Pueden ser parte de tu sexy outfit y, en el momento justo, lo enrollas a lo largo de su pene y comienzas el “sube y baja” como de costumbre, ¡el frío y la textura lo volverán loco!

 

4. Enfócate en su punto más sensible

En un estudio publicado en WebMD se concluyó que la zona más erógena para los hombres era la parte de abajo del glande y la parte inferior del eje del pene, así que centra tus caricias en estas áreas llenas de terminaciones nerviosas, pero hazlo de forma suave y con cuidado, porque es muy sensible.

 

5. Varía el ritmo

Muchas tenemos la idea de que entre más rápido el movimiento, más placer le daremos a nuestra pareja. La realidad es que todo depende del hombre en cuestión, algunos lo prefieren rápido y otros más lento. Para averiguar el estilo de tu chico debes variar la velocidad e identificar las señales de cuál le gusta más, o preguntarle directo. Aún así, las pequeñas variaciones de ritmo e intensidad le dan diferentes sensaciones que pueden acelerar su llegada al orgasmo.

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Aplícalas en cuanto puedas y disfruta cómo se derrite de placer entre tus manos.