Esta prueba te dirá si puedes hacer ejercicio con gripe
¿Tiene algún impacto en el organismo?
Las amantes del ejercicio no se saltan su rutina a menos que sea por una causa de fuerza mayor, como estar enfermas de gripe o resfriado (y a veces ni siquiera por eso). Aunque en general no se recomienda realizar actividad física intensa, existe una clave para saber si puedes ejercitarte estando enferma o no.
Lo bueno y lo malo de hacer ejercicio con gripe o resfriado
Algunas investigaciones señalan que el resfriado no tiene un impacto negativo en tu capacidad de hacer ejercicio, e incluso hay quienes afirman que esto les ayuda a sentirse mejor y aliviarse más rápido.
Para saber si es buena o mala idea seguir con tu rutina fitness, el portal Business Insider compartió la clave que los expertos han propuesto para evaluar la situación: la llamada “regla del cuello”.
La “regla del cuello” es de lo más sencilla: tienes que checar si tus síntomas se concentran todos por encima del cuello (escurrimiento o congestión nasal, estornudos y dolor de garganta, entre otros), o debajo de éste (presión en el pecho, tos continua, dolor muscular, fiebre). Si los malestares están sólo del cuello para arriba, entonces puedes ir al gym, pero si están abajo, evítalo.
Claro que esta regla no es infalible, pues la congestión nasal, por ejemplo, disminuye tu capacidad de oxigenar los músculos y si la actividad es intensa puedes presentar mareos o debilidad. Además, la gripe dificulta la buena hidratación del cuerpo y puede conducir a lesiones, y la falta de concentración que puedes sentir hace que resulte peligroso usar las máquinas del gimnasio.
Nadar, una excelente forma de bajar de peso
Lo más importante es escuchar a tu cuerpo con atención para saber si en verdad te sientes en condiciones de entrenar, aunque siempre es recomendable reducir la intensidad y duración de tu rutina cuando estás enferma.