VEINTITANTOS

Bien reza el dicho: "Nos gusta la mala vida”, y de eso hablaremos porque aun cuando existen señales de advertencia sobre algún chico, las ignoramos porque ya nos acostumbramos a estar con él o a sus malos modos, ¡no tiene por qué ser así! Detéctalos y manténlos a raya…

Aunque cada relación es diferente y única para los miembros de una pareja, existen patrones tóxicos y signos de advertencia que son bastante comunes en todas las relaciones amorosas. Éstos generalmente ocurren en nombre del "amor”, sin embargo, desgraciadamente hay muy poco de este sentimiento de por medio, más bien se trata de amor "inmaduro”.

Y para ahorrarte un doloroso camino al lado de hombres con lo que podrías vivir amores inmaduros, averiguamos cómo son los 6 tipos de novios tóxicos más comunes a los cuales llamaremos Juan para fines prácticos, en qué podría terminar una relación con ellos y, como cereza del pastel, te mostraremos cómo lidiar con ellos. ¡Un combo completísimo!

Por Planet Syndication

Toma nota

La montaña rusa emocional. A Juan le gusta el drama, y cuando las cosas parecen ir bien con Laura, Juan empezará una pelea o buscará culpar a Laura de todo. La adicción al drama tendrá como resultado una turbulenta relación. Los momentos malos serán tantos como los buenos. Cuando Laura se harta de las peleas, Juan explicará que sus arranques son resultado del "mucho” amor que siente por ella.

El hombre plaga, el hombre langosta. Laura está en una nueva relación, cuando su ex-novio, Juan, aparece de nuevo. Él le recuerda lo felices que eran juntos y le dice que aún la ama y quiere ver si pueden darse otra oportunidad. Laura se siente halagada por sus palabras, le hace caso y truena al nuevo galán. Ésta es la tercera vez que regresan. Pasa un mes y Juan le dirá a Laura que las cosas no están funcionando y se ausentará de su vida de nuevo.

El manipulador. A Juan le gusta decirle a Laura cómo vestirse, con quién salir y qué ordenar en restaurantes. El monopolizará su tiempo e insistirá en pasar cada momento con ella, haciéndola entender que es importante que le llame cada 5 minutos. Esto es porque Juan ama demasiado a Laura y no puede estar ni un minuto sin ella.

El Hulk. Juan sería el novio perfecto si no fuera por sus arranques de celos. Él no le permitirá a Laura hablar con otros chicos y cuestionará todo lo que ella haga o diga. A veces él no acepta que siente celos, pero manifestará su enojo de otras maneras como sus largos silencios o poniéndose de malas. Si Laura adivina que está enojado porque habló con su mejor amigo en la fiesta de hace un mes, él no lo aceptará y se desviará reclamándole cualquier cosa. "Si no puedo estar contigo, nadie podrá”.

El psicópata. Juan ha tenido un mal día en el trabajo. Cuando llega a casa, inmediatamente le grita a Laura que es una floja y que la casa siempre está hecha un desastre, siendo que lo único que Laura hizo fue dejar una mancha de agua en la mesa. Puede que Juan hasta golpee al perro de Laura. Ella se alejará encerrándose en su cuarto o saliendo de la casa. Unas horas más tarde, Juan volverá a ser el mismo de siempre y se preguntará por qué Laura está tan distante.

El usado y abusado. Laura ama a Juan, pero lo que ella ama realmente es cuando Juan le compra regalos y pasa por ella al trabajo. Laura se emociona más cuando Juan llega con flores y chocolates a verla. Laura está obsesionada con la idea de que un príncipe azul vendrá a resolverle sus broncas. Si Juan no hubiera pagado en la primera cita, probablemente Laura no estaría saliendo con él.

No dejes que una relación tóxica o un "pero… yo te amo” te haga desperdiciar tu tiempo. Engancharte en una relación tóxica te deprimirá, no importa qué tan fuerte seas. No existe la relación perfecta, pero sí las relaciones sanas. Escoge sabiamente y deja que sus acciones hablen por sí solas.