Disfruta de una piel sin vello por más tiempo.
Sigue estos consejos y olvídate de depilarte por un buen rato.
1. Enjuágate o báñate antes de depilarte para eliminar los aceites naturales y el sudor, e hidratar el vello, lo que hace que sea hasta un 60% más fácil de cortar.
Lo más recomendable es remojarse de 2-3 minutos bajo el agua caliente.
2. Ponte suficiente crema de afeitar antes de depilarte para ayudar a mantener el agua en el vello y garantizar que el rastrillo se deslice fácilmente sobre la piel.
Esto te permitirá estar unos cuantos días sin la necesidad de depilarte. No confíes en el jabón para preparar tu piel porque puede tapar tu rastrillo durante la depilación, causar resequedad y con ello cortes innecesarios.
3. Escoge tu rastrillo inteligentemente.
Es importante escoger uno que esté bien equipado, recuerda calidad es igual a duración, no te vayas por el más barato.
4. Deja al final las zonas más difíciles de afeitar.
La parte de atrás de las rodillas y los muslos, y áreas como los tobillos, donde el hueso está cerca de la superficie de la piel son difíciles de depilar.
5. Limpia y seca tu piel cuidadosamente.
No frotes la piel con fuerza y no la seques por completo. El agua extra en tu cuerpo se absorberá cuando te pongas la crema hidratante, ayudando a eliminar la resequedad, especialmente cuando te acabas de depilar para alcanzar un brillo saludable.
6. Hidrata tus piernas
Prueba aceite de coco o de macadamia; éstos nutrirán profundamente tu piel. Aplícalo todas las noches antes de irte a dormir.
Lista para lucir tus piernas.
AQ