Aunque los enjuages bucales dejan tus dientes más blancos, pueden producir hipersensibilidad en tus dientes. Prueba con otras opciones y remedios naturales para tener una sonrisa impecable.
- Cuida lo que comes. El vino tinto, refresco de cola, café y cigarro son los promotores de que tus dientes se manchen. Bájale a su consumo para evitar que luzcan opacos y avejentados. En cambio, suma a tu dieta manzanas (cómetelas con cáscara), o bien, recurre al vinagre de manzana. Mezcla una cucharadita en un vaso de agua, éste es un práctico enjuage bucal para blanquear los dientes.
- Correcta higiene bucal. Se trata de lavar hasta el último diente y muela, y por supuesto, la lengua. No se te debe olvidar hacerlo, pues durante la noche se encuentra la placa bacteriana en esta área y de no eliminarse afecta la salud de tu dentadura. Hay cepillos que ya tienen incluido un raspador de lengua, si el tuyo no lo tiene, compra uno, pero no la limpies con el cepillo.
- Utiliza hilo dental. Otra pieza imprescindible en la rutina de limpieza dental, ya que éste arrasa con los restos de comida que se alojan entre los dientes, lugares en donde el cepillo no llega. Tómate tu tiempo para usarlo entre cada diente, utilízalo después de cada comida.
- Cambia tu cepillo dental. ¿Cada cuándo lo haces? Lo recomedable es renovarlo cada tres meses, o antes, si notas que las cerdas han perdido su firmeza. Si lo sigues usando después de haber llegado a su vida útil, sólo fomentas que se sigan formando bacterias en tu boca. Al lavarte los dientes no lo hagas con fueza, con frotar las encias de arriba hacia abajo y en movimientos circulares es suficiente.
- Aditamentos efectivos. Al comprar un enjuage bucal checa que no contenga alcohol, actualmente puedes encontrar varias opciones en el mercado. Toma en cuenta que el alcohol reseca las membranas de la boca, haciéndolas vulnerables a los microbios. Mejor evita este componente.
DARC