Sabemos que es difícil encontrar el tiempo, las ganas y los medios para llevar una vida más sana, pero eso no significa que sea imposible. Quizás te cueste mucho trabajo, pero definitivamente podrás lograrlo.
Siéntete mejor contigo misma
Por Beatriz Castillo
Seamos honestas, encontrar el tiempo (y las ganas) para ponernos en forma no es nada fácil. Si trabajas horas, probablemente lo último que quieres es ir al gym a hacer ejercicio y evitar las tentaciones alimenticias no es nada fácil, sobre todo cuando salimos con las amigas o con el galán.
Pero te tenemos una buena noticia. ¡Jamás es demasiado tarde! Nunca es tarde para ponerte en forma y mejorar tu cuerpo, tu salud y tu vida. No importa qué tipo de cuerpo tengas o la condición en la que te encuentres; si tienes ganas, decisión y determinación, ¡nada podrá detenerte!
- Pide ayuda. Que no te dé miedo pedir ayuda. Todas necesitamos un empujoncito de vez en cuando, así que encuentra a alguna persona conocida que lleve una vida activa y pídele un par de tips. No cuesta tanto como un entrenador ni perderás tanto tiempo.
- En casa. Si simplemente no puedes ir a un gym y contratar a un entrenador personal está fuera de la mesa, hacer entre 10 y 20 minutos de ejercicio en casa al día podría ser la solución ideal. Necesitas muy poco equipo y toda la información que requieres ya está disponible en YouTube, ¡así que manos a la obra!
- Entrena con alguien más. Si tienes un amigo o amiga que también tenga interés en ponerse en forma, ¡hazlo con él! De hecho, podrías hacerlo con tu pareja y sería un proyecto increíble para su relación. No sólo te sentirás presionada a hacerlo, sino que servirá a manera de competencia sana.
- Come más sano. Pero no todo depende del ejercicio. Necesitas empezar a tomar decisiones más sanas en tu alimentación. Lo primero es organizar mejor tus compras. Ya sabes lo que no funciona y lo que te está haciendo mal, así que deja de comprarlo y elimínalo de tu dieta. Organiza tu alacena con alimentos sanos y dile adiós a las botanas, papitas y otros alimentos dañinos. Lo siguiente es cuidar tus porciones, especialmente cuando comemos por simple gula. Si no tienes tanta hambre, ¿para qué te sirves dos porciones? Te va a costar controlarte, pero definitivamente vale la pena. ¡Los resultados hablarán por sí mismos!
¿Lista para comenzar una vida más sana?