Aceptar y amar tu cuerpo es súper importante, de entrada, porque así aprendes a cuidarlo y a conocer sus necesidades. ¿Has escuchado alguna vez la frase de “el cuerpo avisa”?
Agradece a tu cuerpo lo que hace por ti
Cuando empiezas a ser receptiva con los mensajes que te envía tu cuerpo, sabes qué le hice bien y qué le da en la torre.
Ponle atención y sube tu autoestima, confianza en ti, ¡y salud!
- Siéntete orgullosa de tu cuerpo, descubre cuáles son tus mejores atributos y sácales provecho.
- Escribe una lista semanal de todas las cosas que tu cuerpo te permite hacer.
- Recuérdate constantemente 10 cosas positivas sobre ti, que no tengan que ver con tu aspecto.
- Enlista a las personas que admiras, ¿realmente importa su talla o su peso para ser admirada?
- Nunca permitas que tu peso o talla te impidan realizar actividades que disfrutas.
- Cuenta tus bendiciones, no sus defectos.
- Piensa en alguna época de tu vida en que te hayas sentido bien con tu cuerpo y decreta que ya te sientes así de nuevo.
- Usa ropa cómoda, linda y que te haga lucir como tu quieres.
- Al despertarte agradece a tu cuerpo el poder descansar y despertar lista para disfrutar tu día.
- Antes de dormir agradécele a tu cuerpo por permitirte haber disfrutado ese día, recuerda algo positivo del día, por muy fugaz que haya sido.
- Busca una actividad física que te gusta y ¡sé constante!
- Coloca en un espejo donde te veas diariamente un letrero que diga: "Soy hermosa en mi interior y exterior”.
Escríbelos, tenlos presentes en tu día a día. Marcarán una diferencia en ti.
DR